El Tiempo, Colombia, Febrero 19 de 2005

Historia de la crisis de los acercamientos entre el Gobierno y el ELN

Una guerra de rumores, acompañada de fuertes pullas del presidente Álvaro Uribe contra esa agrupación, dejó al descubierto el hecho.

La situación, incluso, arrastra al facilitador mexicano Andrés Valencia, en cuya etapa las aproximaciones habían florecido.

La historia se remonta a 20 días atrás, cuando el diplomático -designado por México desde el 18 de junio del 2004 para intentar sentar a las partes-, rechazó de plano una carta que la cúpula del Eln le escribió en términos muy duros y justo cuando estaba por divulgarse un principio de acuerdo para un encuentro personal con él.

Ayer el comisionado Luis Carlos Restrepo comentó infidencias sobre el desencuentro y, en una columna de opinión que publicó EL TIEMPO, dijo que la propuesta aceptada consistía en una reunión en México a la que asistirían miembros del comando central del Eln con el propósito de definir los términos del inicio de un proceso formal.

"El procedimiento resulta sencillo. El Eln expresa su voluntad de no adelantar acciones militares durante el tiempo que dure la reunión en México, mientras el Gobierno se compromete a mantener frente a ese grupo una acción recíproca", escribió el Comisionado, quien dijo que se quedaron esperando que el Coce hiciera público el anuncio.

Según lo acordado, a la reunión acudiría 'Francisco Galán', que actúa como portavoz y está recluido en la cárcel de máxima seguridad de Itagüí. También se convino que el encuentro se llevaría a cabo en una zona inhóspita, para garantizar la seguridad de los jefes de esa guerrilla.

Al parecer el punto de discordia se produjo al momento de hacer pública la decisión a la que llegaron 'Galán', a nombre del Eln, México y el Gobierno colombiano.

Por eso fue que la primera semana de febrero, el presidente Uribe dijo en Cartagena que "a la hora de la verdad" los del Eln eran unos "cobardes" y una semana más tarde en Cali acusó directamente a 'Antonio García', jefe militar del Eln, de ser "saboteador de la paz".

¿Por qué el Presidente se fue contra 'García'? El día en que Valencia se negó a recibirle a 'Francisco Galán' la carta que le fue dirigida en duros términos, ambos se comunicaron por radioteléfono con 'García', quien en lugar de retractarse, ahondó en los términos de la carta.

Valencia le comunicó al Gobierno lo que estaba pasando. El Presidente fue enterado por el Comisionado, quien se encontraba preocupado por la forma como México podía reaccionar.

Sin embargo esta semana los temores fueron disipados. La Cancillería mexicana emitió un comunicado en el que reafirmó su papel facilitador. Valencia regresó al país con un detallado documento para las partes en el que relata paso a paso lo que ha logrado en su labor de facilitación. El viernes estuvo reunido con el Comisionado y el ayer con 'Galán', en Itagüí.

Esta no es la primera vez que cuando algo está prácticamente cocinado con el Eln, se quema en la puerta del horno.

Los 'casi sí' con el Eln

Mediación alemana
Para el 16 de diciembre de 1996 estaba presupuestado instalar en territorio alemán una mesa de paz entre el Gobierno y la cúpula del Eln. Incluso, el grupo insurgente había acordado un cese al fuego a partir del primero de enero de 1997 e inmediatamente liberar a los secuestrados enfermos. Los avances en este frente se vieron afectados por la captura del agente Werner Mauss, pieza clave en los acercamientos, lo que impidió concretar este plan de paz.

Preacuerdo de Viana
El 9 de febrero pasado en el Palacio de Viana, sede de la Cancillería española, dos representantes del Frente Internacional del Eln, 'Milton Hernández' y 'Juan Vásquez', firmaron un acuerdo previo con representantes de la administración Samper. El documento establecía la celebración de una gran reunión entre voceros de la insurgencia, del Estado y de la sociedad civil, a la que llamaron Convención Nacional y la que debía cumplirse entre la primera y segunda vueltas presidenciales. El preacuerdo debía ser ratificado por la cúpula del Eln, pero antes de ese procedimiento fue filtrado a la prensa, lo que originó su congelamiento.

Acuerdo de Mainz
En diciembre de 1997, Werner Mauss y su esposa, Ida, visitaron los campamentos del Eln para reactivar el proceso truncado en 1996. De esta manera y una vez absueltos por la justicia colombiana de cualquier cargo por su mediación en la liberación de la alemana Brigitte Schoene, los Mauss volvieron a tener contactos con el comando central para discutir las bases del acuerdo de Mainz, que acaba de ser firmado en Alemania y que básicamente contempla el desarrollo de la propuesta de la Convención Nacional. En esta oportunidad no participaron representantes del gobierno de Samper. Al regresar al país, los acuerdos fueron fuertemente censurados porque se consideró que legitimaba prácticas como el secuestro.

Acuerdo de Rio Verde
En octubre de 1998 se celebra en Río Verde, oriente antioqueño, el encuentro preparatorio de la Convención Nacional. Los dos voceros del Eln recluidos en la cárcel de Itagüí 'Francisco Galán' y 'Felipe Torres', con salvoconductos del Gobierno, acuden a esa zona y quedan como promotores del Comité de Impulso para la Convención. Cuando el Gobierno, en cabeza de Víctor G. Ricardo, entra en escena se reúne con 'Antonio García' en Caracas y ahí el asunto se complica al punto que nada se concreta.

Zona de encuentro
Luego de una serie de reuniones en Ginebra (Suiza) a mediados del 2001, el Gobierno y el Eln definieron una zona de encuentro en la que hubo incluso un texto que regulaba el cronograma a seguir, la seguridad para el área, los compromisos presidenciales, la verificación, la infraestructura y los términos de la convocatoria de la convención nacional. En estos acercamientos participaron el comisionado Camilo Gómez y los delegados del Eln Ramiro Vargas y Milton Hernández. Sin embargo, el boicoteo de los paramilitares en el sur de Bolívar, donde se establecería esta zona, impidió la instalación del área.

Acuerdo por Colombia
Pese a que el Eln habÍa dicho que con el gobierno de Pastrana 'ya no había nada qué hablar', en La Habana (Cuba) la cúpula del grupo insurgente y los negociadores oficiales firmaron en diciembre del 2001 el 'Acuerdo por Colombia' , un documento que se convertiría en la brújula para reactivar el truncado proceso que no ha podido despegar desde 1995. En el acuerdo de siete puntos, firmado en presencia de representantes de los cinco países amigos del proceso (Cuba, Francia, Noruega, España y Suiza), las partes se comprometieron a iniciar una serie de rondas de trabajo a partir del 12 de diciembre. El primer tema que se debatiría sería el del cese del fuego y de hostilidades. Las partes no lograron implementar este mecanismo.